AMD Radeon R7 260X

AMD Radeon R7 260X: retrospectiva de una GPU económica en 2025
Un análisis sobre las capacidades, el rendimiento y la relevancia de una tarjeta gráfica de hace diez años.
Introducción
En un mundo dominado por tarjetas gráficas que soportan trazado de rayos y tecnologías de redes neuronales, la AMD Radeon R7 260X parece una reliquia del pasado. Lanzado en 2013, este modelo fue una elección popular entre los jugadores con presupuesto limitado. Pero, ¿cómo se presenta en 2025? Vamos a explorar quién puede beneficiarse de esta GPU hoy en día y cuáles son sus capacidades.
1. Arquitectura y características clave
Arquitectura GCN 2.0: la base de la estabilidad
La R7 260X está construida sobre la microarquitectura GCN (Graphics Core Next) 2.0, que en su momento le otorgó a AMD una ventaja competitiva. El chip fue fabricado con un proceso de 28 nm, que era estándar en 2013, pero hoy parece arcaico en comparación con los procesos de 5 nm y 6 nm de las GPU modernas.
Características únicas de la época
La tarjeta soportó Mantle, un API de bajo nivel, precursor de Vulkan y DirectX 12. Sin embargo, tecnologías como FidelityFX, trazado de rayos o escalado AI (DLSS/FSR) están ausentes. Entre las "ventajas" se incluye el soporte para Eyefinity para conectar múltiples monitores y CrossFire para combinar dos tarjetas, aunque en 2025 estas características son prácticamente irrelevantes.
2. Memoria: especificaciones modestas
GDDR5 y bus de 128 bits
La cantidad de memoria es de 2 GB GDDR5 con un bus de 128 bits. El ancho de banda es de 104 GB/s. Para comparar, incluso las GPU económicas de 2025 (como la AMD Radeon RX 7500) vienen equipadas con 8 GB GDDR6 y un ancho de banda a partir de 224 GB/s.
Impacto en el rendimiento
2 GB de memoria de video son una deficiencia crítica para los juegos modernos. Incluso en proyectos poco exigentes (como Fortnite o Apex Legends), con texturas de alta calidad, pueden ocurrir retardos y carga de objetos. Para tareas de oficina o ver videos en 4K esto podría ser suficiente, pero para juegos es claramente insuficiente.
3. Rendimiento en juegos: ambiciones modestas
1080p: mínimo para sobrevivir
En juegos de la década de 2010, como CS:GO, Dota 2 o GTA V, la R7 260X logra entre 40 y 60 FPS en configuraciones medias. Sin embargo, en proyectos de 2023-2025 (como Cyberpunk 2077: Phantom Liberty o Starfield), incluso en configuraciones bajas, la tasa de fotogramas rara vez supera los 20-25 FPS. Las resoluciones 1440p y 4K no son viables: falta potencia y memoria.
Trazado de rayos: sin soporte
La trazado de rayos por hardware está ausente, al igual que los análogos por software. Incluso con mods como Reshade, el rendimiento cae a niveles inaceptables.
4. Tareas profesionales: no es su especialidad principal
OpenCL y capacidades limitadas
La R7 260X soporta OpenCL 1.2, lo que permite utilizarla para tareas básicas:
- Renderizado de escenas 3D simples en Blender (pero el tiempo de procesamiento es varias veces mayor que el de las GPU modernas).
- Codificación de video en resoluciones de hasta 1080p (la velocidad media en HandBrake es de ~15-20 cuadros/segundo).
- Cálculos científicos: solo adecuada para proyectos educativos debido a su limitada potencia de cálculo.
¿CUDA? Solo con competidores
La tecnología NVIDIA CUDA no está presente, lo que reduce el rango de software compatible. No se recomienda la tarjeta para trabajos profesionales.
5. Consumo energético y disipación de calor
TDP 115 W: apetito modesto
Bajo los estándares de 2025, el consumo energético es bajo. Para comparar, la NVIDIA RTX 4060 consume 120 W, pero ofrece un rendimiento significativamente superior.
Refrigeración y cuerpo
El sistema de refrigeración estándar (radiador + ventilador) maneja la carga, pero hace ruido bajo estrés. Recomendaciones:
- Una carcasa con al menos un ventilador de entrada y otro de salida.
- Limpieza regular del polvo (debido a la antigüedad de la tarjeta, la pasta térmica podría haber perdido efectividad).
6. Comparativa con competidores
Batalla retro: GTX 750 Ti vs. R7 260X
En su momento, el principal competidor fue la NVIDIA GTX 750 Ti (2 GB GDDR5, 60 W TDP). Ambas tarjetas mostraban un rendimiento similar en FPS, pero la GTX 750 Ti consumía menos energía. En 2025, ambos modelos han quedado obsoletos.
Análogos modernos
Novedades económicas de 2025, como la Intel Arc A580 (8 GB GDDR6, $180) o la AMD Radeon RX 7500 (6 GB GDDR6, $170), superan a la R7 260X en 4-5 veces en rendimiento. Incluso la gráfica integrada Ryzen 5 8600G (Radeon 760M) es comparable en juegos.
7. Consejos prácticos
Fuente de alimentación: 450 W — suficiente
La tarjeta requiere un conector de 6 pines. Incluso una fuente de alimentación económica con certificación 80+ Bronze será adecuada. Sin embargo, si se planea una actualización, es mejor optar por un modelo con mayor capacidad.
Compatibilidad con plataformas
- Interfaz PCIe 3.0 x16 — funciona en placas base modernas, pero no aprovecha el potencial de PCIe 5.0.
- Controladores: el soporte oficial de AMD se detuvo en 2020. Las últimas versiones de software son Adrenalin 21.6.1. Para Windows 11/12 pueden existir conflictos.
8. Pros y contras
Pros:
- Precio bajo (los nuevos ejemplares, si se encuentran, oscilan entre $50 y $70).
- Soporte para configuraciones de múltiples monitores.
- Funcionamiento silencioso en tareas de oficina.
Contras:
- Rendimiento débil en juegos modernos.
- Solo 2 GB de memoria de video.
- Ausencia de soporte para tecnologías modernas (trazado, FSR 3.0).
9. Conclusión final: ¿para quién es adecuada la R7 260X?
¿Para quién:
- Propietarios de PCs viejos que necesitan reemplazar una tarjeta de video quemada por poco dinero.
- Entusiastas de juegos retro (era de DirectX 9/10).
- Usuarios que necesitan una tarjeta para oficina o HTPC (ver videos, trabajar con documentos).
¿Por qué no debería comprarse:
Si su objetivo son juegos modernos, edición de video 4K o aprendizaje automático, la R7 260X ha quedado irremediablemente obsoleta. Incluso los modelos económicos de 2025 ofrecerán un mejor rendimiento por el mismo precio de $150-200.
Conclusión
La AMD Radeon R7 260X es un monumento a una época en la que 2 GB de memoria eran suficientes para jugar, y la arquitectura GCN era una revolución. En 2025, su destino son escenarios de nicho. Pero si estás armando un PC para tu abuela o deseas revivir un viejo sistema, esta tarjeta puede ser una solución económica. Lo más importante es no esperar milagros de ella.